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Alergia estacional: La primavera llegó con flores... ¡y muchos estornudos!

Es una de las estaciones más esperadas del año, gracias a sus días soleados y agradables temperaturas. Sin embargo, para quienes tienen alergias, esta temporada es también sinónimo de ojos llorosos, secreción nasal, picazón y estornudos, síntomas que cada vez son más comunes. Así lo señalan diversos estudios, que dan cuenta de que en los últimos 50 años la prevalencia de alergias ha aumentado progresivamente hasta afectar a cerca del 30% de la población mundial.

Pero, ¿qué son las alergias? El Dr. Sahba Sedaghat, otorrinolaringólogo de Clínica Biobío, explica que es una respuesta del sistema inmunológico frente a alguna sustancia en particular, como podría ser -en esta temporada- el polen.

“Las alergias no necesariamente son permanentes, pudiendo desarrollarse en cualquier etapa de la vida o desaparecer con el tiempo. Por ello, aunque su presencia es más común durante la infancia, las personas pueden experimentar su primer episodio alérgico a cualquier edad”, afirma el especialista.

Añade que los principales síntomas de esta afección incluyen estornudos, secreción nasal y/o ocular, y prurito en los ojos y/o la nariz. “En el caso de las alergias primaverales, estas afectan principalmente las vías respiratorias y los ojos, dado que son las zonas de contacto más intenso con la sustancia que desencadena la alergia. No obstante, en algunos pacientes también puede haber manifestaciones cutáneas, como sarpullidos y prurito”, detalla.

¿Alergia o resfrío?

Dado que algunos de los síntomas de las alergias -como la congestión nasal y los estornudos- también se presentan en caso de resfríos, resulta fácil confundir ambas afecciones. No obstante, dice el Dr. Sedaghat, también hay factores que nos permiten diferenciarlas. “Distinguir entre una alergia y un cuadro gripal puede ser desafiante, debido a la similitud de sus síntomas. Sin embargo, hay ciertas señales que pueden ayudar: las alergias suelen causar picazón en los ojos y la nariz, y no están acompañadas de fiebre, mientras que la gripe puede provocar fiebre alta y dolores corporales. Además, los síntomas de la gripe aparecen rápidamente y son más intensos, en tanto que las alergias tienden a persistir durante todo el tiempo que se esté expuesto al alérgeno”.

Es justamente por su extensa duración que se recomienda acudir a un otorrinolaringólogo ante la sospecha, de modo de atenuar lo más posible sus incómodas manifestaciones.

“El tratamiento de las alergias es principalmente sintomático, por lo que va a depender de la intensidad de los síntomas y de las molestias que estos generen en la persona. En casos más serios, hay tratamientos de inmunoterapia dirigidos a modular la respuesta del sistema inmunológico frente a ciertas sustancias, pero eso dependerá de la situación de cada paciente. Por ello, lo ideal es acudir a un especialista que pueda evaluar su condición y descubrir las causas específicas de la alergia que lo está afectando, para así acceder a un tratamiento preciso y efectivo”, puntualiza el profesional.



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